EL MUNDO financiero da por hecho que España solicitará a Europa en
septiembre la ayuda económica que necesita para evitar el colapso del
país. Es lo que se ha denominado rescate suave. Así se desprende de las
declaraciones de ayer del ministro Guindos, cuando reclamaba al BCE que
comprara deuda española «sin límite y de forma contundente» para aliviar
la presión. Guindos reconocía que esa ayuda -que algunos bancos de
inversión cifran en unos 92.000 millones de euros, como informamos hoy-
exigirán contrapartidas, que serán debatidas por el Eurogrupo y el
Ecofín a mediados de septiembre. El ministro dijo que desde «un punto de
vista genérico» están aceptadas en el programa de ajuste presupuestario
de 2013-2014 presentado por el Ejecutivo a Bruselas. Pero no debemos
olvidar que el comisario Rehn recordó el lunes que acudir a los fondos
de rescate supondrá «una condicionalidad estricta» para el estado que lo
haga. Veremos si llegan más ajustes desde Europa
epsimo y EL MUNDO
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