Cree «un insulto» mantener las «prebendas» con el paro y los recortes
La
Central Sindical Independiente y de Funcionarios en Andalucía (CSIF-A)
ha anunciado que ejercerá «todas las medidas legales oportunas» si la
Junta de Andalucía confirma la intención que, a su juicio, tiene de
mantener las «millonarias subvenciones» a sus «dos sindicatos afines»,
en referencia a UGT-A y CCOO-A, al considerarlo «una tropelía y un
insulto a la ciudadanía andaluza, que es la que más está sufriendo el
paro, los recortes y la crisis en toda España».
Tal
y como ha informado los últimos días ABC, en un solo año la Junta
repartió entre UGT y CC. OO. 241 millones de euros, más de 40.000
millones de las antiguas pesetas. Las principales partidas que
recibieron ambos sindicatos de la Junta en 2010 fueron 215 millones del
Servicio Andaluz de Empleo para pagar cursos formativos y planes de
empleo; 2 millones por asistir a consejos de administración de
organismos oficiales; y 1,2 millones del Instituto de la Mujer para
planes de igualdad y defensa legal de las mujeres. Además, entre 2008 y
2012 la Junta dio 1,2 millones que han permitido a ambas organizaciones
ampliar de forma espectacular su red de oficinas.
La concertación
Tanto UGT como CC.
OO. aspiran a mantener este nivel de ingresos cuando se constituya el
próximo Gobierno andaluz, que estará en manos de PSOE e IU. De hecho,
sus principales responsables en Andalucía, Manuel Pastrana y Francisco
Carbonero, se reunieron días atrás con los líderes de ambos partidos:
José Antonio Griñán y Diego Valderas. Al primero le pidieron mantener la
concertación social —mediante la cual los sindicatos y la Confederación
de Empresarios de Andalucía reciben subvenciones millonarias; mientras
que al segundo le reclamaron que se ampliaran esos acuerdos.
Ante
esta situación, no es extraño que CSIF advirtiera al Ejecutivo andaluz
que acudirá a los tribunales si no recorta las ayudas a CC. OO. y UGT,
por considerarlo un «insulto» a la ciudadanía andaluza. En un
comunicado, el sindicato trasladó ayer su «malestar e indignación» al
respecto, ya que, según ha subrayado, Andalucía es la comunidad autónoma
española «con mayor tasa de paro» y sus ciudadanos «ven peligrar a
diario sus puestos de trabajo y sus derechos sociales públicos en
enseñanza, sanidad o dependencia».
Además,
esta central sindical se ha mostrado crítica con UGT-A y CCOO-A,
organizaciones que, a su juicio, «han demostrado, por activa y por
pasiva, que sólo defienden los intereses de unos pocos, no se preocupan
por los trabajadores y sus problemas», y, además, están «envueltas en
varios casos de corrupción».
Este
sindicato fue más concreto y criticó duramente las ayudas millonarias
que ambas organizaciones están recibiendo de la administración
autonómica andaluza. Para CSIF, estas subvenciones demuestran «la
complicidad que la Junta de Andalucía mantiene con algunos sindicatos y
organizaciones empresariales que están de su lado en asuntos tan turbios
y poco claros como la reordenación del sector público andaluz».
De
esta forma, desde este sindicato se relacionaba las subvenciones que
reciben CC. OO. y UGT del Gobierno andaluz con su apoyo a la denominada
Ley del «enchufismo» que impulsó la Consejería de Hacienda, a la que se
oponen la práctica totalidad de los funcionarios, que han recurrido la
norma en los tribunales.
A
diferencia de lo que, a su juicio, ocurre con UGT-A y CCOO-A, desde
CSIF ha destacado su «independencia y profesionalidad» como «señas de
identidad» que lo distinguen de ambas centrales sindicales, junto al
hecho de que su financiación procede «exclusivamente de las cuotas de
sus afiliados» y «no recibe prebendas millonarias».
ABC
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