domingo, 20 de noviembre de 2011

HOY 20-N, UN GRAN DÍA PARA LOS DEMÓCRATAS

Los ciudadanos deciden hoy en las urnas el futuro de España

MÁS de 35 millones de españoles están hoy convocados a las urnas en unas elecciones que son, como ya hemos dicho, las más importantes desde el final de la Transición. Lo son no porque esté en juego una alternancia de poder entre dos partidos que presentan programas distintos sino porque nos hallamos en una dramática crisis económica que ha provocado cinco millones de parados y el quebranto de nuestras cuentas públicas.

El Gobierno que salga de las elecciones de hoy va a tener que adoptar medidas muy impopulares para poder devolver a la economía española a la senda del crecimiento y de la creación de empleo. No hay otra opción en unos momentos en que los mercados desconfían de España y la prima de riesgo ha llegado a superar los 500 puntos.

Ante una situación tan mala, sería muy conveniente que los ciudadanos otorgaran un mandato claro para que el futuro Gobierno tuviera el suficiente margen de maniobra parlamentario para llevar a cabo ese ajuste. Pero además la mayoría absoluta sería deseable para que ese Gobierno tuviera la fuerza suficiente en Europa para defender los intereses españoles.

No podemos olvidar tampoco que la legitimidad del poder ejecutivo nace de las urnas, de los votos de los ciudadanos. Por ello, es muy importante que los españoles acudan hoy masivamente a depositar su sufragio para elegir libremente a sus representantes.

Esto es especialmente relevante en unos momentos en los que crece el déscredito de los políticos y en los que se cuestiona incluso las instituciones representativas. Hemos visto en Italia y Grecia como dos presidentes de Gobierno elegidos por los ciudadanos se veían forzados a dimitir y eran sustituidos por dos personas de perfil tecnocrático.

Evidentemente ese no es el camino que queremos para España. El Gobierno que elijan hoy los ciudadanos debe tener toda la legitimación para hacer su trabajo y para sacar a nuestro país de la crisis. Estamos convencidos de que si el nuevo Ejecutivo logra crear empleo y arreglar el desfase de las cuentas buena parte de esa sensación de descontento desaparecerá.

Pero para ello es importante que los nuevos gobernantes repartan de forma equitativa los sacrificios y, sobre todo, que otorguen prioridad a la regeneración de la vida pública y la lucha contra la corrupción.

La salida de la crisis y el fortalecimiento de la democracia deberían ser los dos pilares de la acción del nuevo Gobierno que parte de una situación muy mala pero no desesperada. Nuestro suplemento Mercados recoge hoy la existencia de diez indicadores que permiten confiar en una recuperación de la economía española si las cosas se hacen bien.

No es un tópico decir que el futuro está en nuestros manos. Como decíamos ayer, España debe ayudarse a sí misma. Pero todo empieza por elegir bien a nuestros gobernantes. Nuestro periódico ya ha expresado con claridad cuáles son sus recomendaciones. Hoy lo que toca es votar con entera libertad y de acuerdo a las convicciones de cada uno

TOCADOS Y HUNDIDOS

Rubalcaba, el apaño para sostener en pie la Casa del Pueblo

En la campaña fue como perdedor, pero el PSOE no descarta aún dar un susto al PP

Dicen que hubo una encuesta del PSOE tras el anuncio de José Luis Rodríguez Zapatero de no volver a ser candidato, donde los socialistas estaban más cerca de lograr 80 diputados que de los 90 escaños.

Aquello encendió todas las alarmas del partido. Y se optó por decisiones que, ahora, pueden parecer un tanto precipitadas. Ni una broma con ir a un proceso de primarias; decisión unánime para optar por un valor seguro -el político más valorado del PSOE, por aquel entonces, en todas las encuestas-, y un único objetivo: apuntalar y sostener la Casa del Pueblo socialista. Aunque la travesía en el desierto de la oposición pueda ser larga.

De esta manera, Rubalcaba accedió y llegó a la condición de candidato. Sabiendo que estaba ante una misión imposible, cuyo único objetivo era mantener al PSOE como la única alternativa al PP, cuando se den las circunstancias necesarias para ello.

Como siempre, nadie le puede reprochar a Rubalcaba que haya ahorrado un esfuerzo. Se ha multiplicado, ha ido a todos los rincones de España mientras le quedaban fuerzas y voz.

Y, además, ha hecho su propia campaña. El hombre que ha dirigido como número dos tantas elecciones de candidatos socialistas a todos los niveles, esta vez ha llevado la suya de forma personalista. Ha escuchado a sus asesores y, en especial, a su jefa de campaña, Elena Valenciano. Pero desde los discursos hasta los tiempos políticos los ha decidido él a su manera.

En ningún momento ha querido arriesgar. Ha parado iniciativas para calentar la campaña, ha sido más que prudente en todas sus entrevistas y declaraciones. En resumen, ha sido muy conservador en sus planteamientos, excepto en las últimas 48 horas, donde ha ido a mensajes más arriesgados. Pero siempre como perdedor.

Además, apostó sin complejos por recuperar al viejo PSOE, tirando de Felipe González, Alfonso Guerra, Javier Solana, etc, mientras dejó en un segundo plano a Zapatero hasta que lo recuperó tímidamente al final de la campaña.

No obstante, la cúpula del PSOE está contenta por el desarrollo electoral en unas circunstancias muy difíciles. Es más, según su última encuesta, que difiere de todas las demás, la distancia electoral está cerca de los siete puntos con el Partido Popular, lo que no le garantizaría a Rajoy la mayoría absoluta.

Estas informaciones, procedentes de la dirección del PSOE, recuerdan el inicio de una canción de Sabina: «No se puede afirmar que te engañaran, cuando te mentían...».

epsimo y EL MUNDO_________________
Adolfo Suárez Illana, en el balcón de La Moncloa.

Un palacio con síndrome

El paso por La Moncloa ha marcado en mayor o menor medida la vida de todos los presidentes que han vivido en ella. Hoy se decide quién será su próximo inquilino.


Los retos económicos del nuevo Gobierno

Cinco millones de parados, una prima de riesgo cercana a los 500 puntos y la obligación de reducir el déficit esperan al nuevo presidente. Los mercados exigen medidas ambiciosas e inmediatas.

Una herencia envenenada

El nuevo Ejecutivo recibirá un legado de cinco millones de parados, una economía en zona de rescate, a punto de entrar en recesión y con un agujero en sus cuentas de más de 70.000 millones

Una gran nación llamada España

_______________________

No hay comentarios:

Publicar un comentario