EL MOVIMIENTO del 15-M, un estallido social que surgió de la indignación de muchos españoles con su clase política, incapaz de dar respuesta a la crisis y empecinada en no ofrecer mayor participación a los ciudadanos, está siendo aprovechado por grupos antisistema para adueñarse de la calle. Hoy, cuando se cumple un mes del inicio de las manifestaciones, una minoría radicalizada y violenta pretende capitalizar y explotar ese malestar. Lo que empezó siendo una protesta pacífica y plural ha derivado en actuaciones injustificables de grupos anticapitalistas y extremistas de izquierdas.

El ejemplo más claro es la intimidación ejercida sobre Ruiz-Gallardón, al que un grupo organizado insultó y persiguió a las puertas de su casa. Ocurrió en la noche del lunes, y de nada sirvió que estuviera junto a su familia. Las señas de su domicilio particular fueron publicadas impunemente en las redes sociales con la intención de sumar efectivos a la protesta, que tenía como pretexto la limitación de conciertos en el barrio de Chueca durante el Orgullo Gay. El paso intolerable que han dado los nuevos indignados es el de poner en la diana a políticos con nombre y apellidos: se ha sustituido el reproche al sistema, por la furia contra representantes de las instituciones.

La radicalización se ha hecho patente también en Barcelona, donde ayer hubo que cerrar el parque de la Ciutadella para sorpresa de miles de turistas y barceloneses. Los radicales dirigieron varias marchas con la intención de acampar en este recinto, en cuyo interior está el Parlament. El objetivo era «paralizar la actividad parlamentaria» para boicotear el debate de Presupuestos que hoy comienza en la Cámara catalana, con el argumento de que hay que frenar los recortes que propone Artur Mas. La actuación recuerda a las que la semana pasada se produjeron a las puertas del Congreso de los Diputados y ante el Parlamento valenciano.

La agresividad de los manifestantes ha ido en aumento justo en un momento en el que los políticos han empezado a hacer gestos para dar respuesta a demandas de los ciudadanos. Los presidentes del Congreso y del Senado acordaron ayer suprimir algunos de los privilegios de los parlamentarios, como los complementos de pensiones. Además, anunciaron que a partir de septiembre cualquiera podrá consultar en internet los bienes y renta de todos los diputados y senadores, una buena medida de transparencia. Y días atrás en varias instituciones se abrió el debate de la supresión de coches oficiales, que empieza a traducirse en su reducción. En esta misma línea, la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, ha propuesto en su discurso de investidura desbloquear las listas electorales y fomentar nuevas medidas de ahorro y transparencia.

El problema más inmediato no son los políticos, sino la impunidad de los indignados, seguramente envalentonados al ver que han podido tomar la calle cuando han querido y el tiempo que han gustado. Se han enseñoreado de espacios públicos saltándose leyes y ordenanzas sin que Interior diera una respuesta adecuada. Al contrario: dejó que los acontecimientos fueran a más y escaparan de su control. Rubalcaba ha llegado a presumir de sus simpatías hacia algunos de los planteamientos de los manifestantes, una actitud irresponsable con la que seguramente busca réditos electorales, pero que se vuelve en su contra. Aguirre le criticó ayer con razón por haber «permanecido impasible ante las manifestaciones y coacciones» que han sufrido ya varios cargos públicos, la mayoría, no parece casual, del PP.

La realidad hoy es que las acampadas han dado paso a la persecución intolerable de representantes públicos, y la democracia real ya que se reclamaba en las plazas de las ciudades del país a actos de puro matonismo. El Gobierno no puede seguir con los brazos cruzados ante el desafío que los exaltados le han planteado en la calle.

¿Un guiño de Rubalcaba a ETA o sólo al PNV?

EL MUNDO revela hoy que Interior ha puesto en marcha una serie de medidas que favorecen a presos de ETA. La más llamativa por inédita es la excarcelación de siete etarras que disfrutan del tercer grado y que ya no tendrán que ir a dormir a la cárcel tras ser controlados por una pulsera electrónica. Pero también Instituciones Penitenciarias está acercando presos a las prisiones cercanas al País Vasco y concediendo beneficios penitenciarios a etarras históricos como Carmen Guisasola, condenada por cuatro asesinatos. La cuestión es por qué Rubalcaba está actuando así. ¿Es un guiño destinado a convencer a ETA de que haga un comunicado en el que renuncie definitivamente a las armas? ¿O es un intento de congraciarse con un PNV que le exige acercamientos y beneficios penitenciarios? Podrían ser también las dos cosas, ya que la política antiterrorista de Rubalcaba es cada día más opaca. No sabemos exactamente a qué esta jugando, pero sus decisiones están causando consternación en las asociaciones de víctimas que no comprenden esta generosidad con los asesinos y sus colaboradores.

La Policía Municipal de San Sebastián teme que Bildu le coloque a un jefe proetarra

El alcalde todavía no ha explicado si hará cambios en la Guardia Urbana. La banda siempre ha introducido ‘topos’ en este cuerpo.

Del ministro 'indignado' al amigo de las cajas

VALERIANO GÓMEZ, el ministro de Trabajo del Gobierno de los casi cinco millones de parados, se vistió ayer de indignado de la Puerta del Sol y culpó a la banca del alto nivel de desempleo del país. Sin ruborizarse, afirmó en Santander -al lado de sus amigos los líderes sindicales- que «los comportamientos del sistema financiero y la asunción de riesgos en el sector inmobiliario durante el boom» son los causantes de la crisis del mercado laboral. La banca es tan culpable del paro como el Gobierno, el Banco de España, la oposición, los sindicatos o los ciudadanos y las empresas que aceptaron endeudarse sin calibrar las consecuencias. Pero esta demonización del sector financiero por parte de un miembro del Ejecutivo choca con la decisión de otro, el ex secretario de Estado de Hacienda Carlos Ocaña, de fichar como director general de Funcas, el servicio de estudios de las antisociales cajas de ahorros. Claro que Ocaña llegará a Funcas con el triple de sueldo que el que tenía en la Administración y tras haber favorecido a las cajas con cambios legislativos. Al menos en este caso la banca ha creado empleo.

epsimo y EL MUNDO________________________

Gobierno deslegitimado
Resulta un tanto ocioso el pulso interno del PSOE entre quienes pretenden agotar la legislatura y quienes quieren un adelanto electoral en otoño.
“Zapatero ya no depende de sí mismo y debe convocar elecciones generales de inmediato”
Diez personalidades de la economía y la cultura reclaman que el Gobierno convoque a las urnas. “Si no hay un revulsivo, la situación puede ser aún más patética”. “Estamos mucho peor que hace un año”.