La situación se agrava en Huelva con la sobrecarga de trabajo que padecen estos operariosEl colectivo de funcionarios de prisiones ha sufrido los primeros atrasos salariales tal y como ha denunciado el sindicato CSI-F; concretamente, los trabajadores han dejado de percibir el complemento de productividad -unos 200 euros de la nómina- y las cantidades correspondientes a los días especiales como el 24 y el 31 de diciembre. Por parte de la Administración, el pasado mes de diciembre se pagó parte de la cantidad adeudada después de que en septiembre de 2010 empezaran las demoras, por lo que la Central Sindical considera que "llega tarde y los atrasos deben pagarse en su totalidad lo antes posible".
Con los atrasos y los recortes salariales, este colectivo de trabajadores ha visto mermadas sus remuneraciones mientras que, de forma paralela, ha aumentado la carga de trabajo, según se señala desde CSI-F. Tal y como señala Arminda Prieto, su delegada en la penitenciaría de Huelva, "un solo funcionario se ocupa de una unidad de 120 internos; con suerte, si hay refuerzo de un compañero la ratio se sitúa en un trabajador para cada 60 o 70 presos".
Otro ejemplo es el Módulo de Respeto donde sólo hay una funcionaria para atender entre 60 y 80 personas "sin contemplar en ningún momento la ampliación del personal", precisa Prieto. Para CSI-F, estas cifras son "preocupantes" y señala como principal motivo la política de la Administración que ha dejado de cubrir parte de las jubilaciones y las bajas y ha paralizado la oferta de empleo público prácticamente desde abril.
Así, la reducción de personal es ya del 25% a lo que se suma la disminución de permisos y vacaciones de los funcionarios de prisiones. Especialmente preocupante para CSI-F es además, la escasez de nuevos puestos de trabajo y la falta de regularización de algunos de ellos que carecen de soporte legal como los grupos de control o seguimiento de drogas. Esta situación está provocando el malestar de los trabajadores que están asumiendo la carga de trabajo de otros compañeros sin ninguna contraprestación a cambio; al contrario, se les está "exprimiendo" y reduciendo derechos laborales.
Como alternativa, desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios se han propuesto una serie de medidas encaminadas a la mejora de las condiciones laborales de este colectivo entre las que destacan la remuneración del trabajo nocturno, el establecimiento de un sistema de seguridad, el desarrollo de una política preventiva en la Institución y la puesta en marcha de un mapa de riesgos laborales donde queden reflejadas las enfermedades profesionales.
Con los atrasos y los recortes salariales, este colectivo de trabajadores ha visto mermadas sus remuneraciones mientras que, de forma paralela, ha aumentado la carga de trabajo, según se señala desde CSI-F. Tal y como señala Arminda Prieto, su delegada en la penitenciaría de Huelva, "un solo funcionario se ocupa de una unidad de 120 internos; con suerte, si hay refuerzo de un compañero la ratio se sitúa en un trabajador para cada 60 o 70 presos".
Otro ejemplo es el Módulo de Respeto donde sólo hay una funcionaria para atender entre 60 y 80 personas "sin contemplar en ningún momento la ampliación del personal", precisa Prieto. Para CSI-F, estas cifras son "preocupantes" y señala como principal motivo la política de la Administración que ha dejado de cubrir parte de las jubilaciones y las bajas y ha paralizado la oferta de empleo público prácticamente desde abril.
Así, la reducción de personal es ya del 25% a lo que se suma la disminución de permisos y vacaciones de los funcionarios de prisiones. Especialmente preocupante para CSI-F es además, la escasez de nuevos puestos de trabajo y la falta de regularización de algunos de ellos que carecen de soporte legal como los grupos de control o seguimiento de drogas. Esta situación está provocando el malestar de los trabajadores que están asumiendo la carga de trabajo de otros compañeros sin ninguna contraprestación a cambio; al contrario, se les está "exprimiendo" y reduciendo derechos laborales.
Como alternativa, desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios se han propuesto una serie de medidas encaminadas a la mejora de las condiciones laborales de este colectivo entre las que destacan la remuneración del trabajo nocturno, el establecimiento de un sistema de seguridad, el desarrollo de una política preventiva en la Institución y la puesta en marcha de un mapa de riesgos laborales donde queden reflejadas las enfermedades profesionales.
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