La Secretaria General de Instituciones Penitenciarias sigue mintiendo
En un alarde de chabacanería la Secretaria General de Instituciones Penitenciarias sigue manipulando a los medios informativos y dudando del intelecto de los Trabajadores Penitenciarios.
La señora Gallizo presume que su buena “gestión” ha supuesto un incremento del 27% de las plantillas. Eso que se lo cuente a los funcionarios de vigilancia, ya que en muchos casos un funcionario está custodiando él solo a 150 internos, y a los compañeros que en los últimos meses han sido agredidos, heridos o han acabado en el hospital por la acuciante falta de personal que sufrimos.
Otra de las mentiras que cuenta, es que nuestras retribuciones han aumentado un 26% desde el año 2004. Cualquiera que compare una nómina del año 2004 con otra del año 2010 comprobará que esto es un gran engaño.
Señora Gallizo deje de sacar notas de prensa manipuladas y que atentan contra la inteligencia de los Empleados Penitenciarios.
Sra. Gallizo, desde CSI-F le exigimos que quite de una vez el lápiz óptico y deje de incordial a los trabajadores penitenciarios. Por desgracia sus asalariados.
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A CONTINUACIÓN REPRODUCIMOS LITERALMENTE LAS DECLARACIONES DE LA SECRETARIA GENERAL PARA EL BIENESTAR DE LOS PRESOS Y EL SUPLICIO PARA LOS FUNCIONARIOS:
Conscientes de que la población reclusa ha sufrido un incremento del 26% desde 2004, las sucesivas Ofertas de Empleo Público han permitido la incorporación de 5.747 nuevos funcionarios, lo que ha supuesto un incremento de los trabajadores penitenciarios del 27% entre 2004 y 2010. Esto ha permitido que se estén poniendo en marcha nuevos centros penitenciarios para hacer frente a la sobreocupación de los ya existentes.
Por otra parte, las condiciones laborales de los trabajadores han mejorado sustancialmente en medios materiales y en retribuciones salariales. Así:
Las retribuciones se han incrementado un 26% de media anual. (Este porcentaje ya incluye el 5% de bajada general a todos los funcionarios públicos).
El crédito para la partida de productividad ha pasado de 21.636. 870€ en 2004 a 40.859.970€ en 2010.
Dentro del proceso de modernización que se está llevando a cabo en los centros penitenciarios para mejorar la seguridad de los trabajadores y hacer más eficiente su trabajo, se han invertido en estos años, entre otras partidas,
- 28.622.085€ en equipamientos informáticos
- 1.901.447€ hasta 2011 en radiotransmisores para pasar de tecnología analógica a digital.
- 815.959€ en equipos de protección individual para los trabajadores.
- 240.000€ hasta 2011 en un dispositivo óptico que permite la seguridad y fiabilidad de datos electrónicos frente a soportes de papel.
Dentro de la política preventiva, se ha creado un servicio de Prevención de Riesgos Laborales, y todos los centros penitenciarios cuentan con un Plan de Prevención y Evaluación de Riesgos Laborales y vigilancia de la salud.
En cuanto al paso a la segunda actividad demandado por los representantes de los trabajadores, no se ha llagado a un acuerdo ya que las organizaciones sindicales ponen como condición que la segunda actividad comporte la liberación de todo servicio, lo que en la práctica supondría una jubilación anticipada a los 55 años pagada por la Institución Penitenciaria.
Igualmente, se han realizado numerosas obras de mejora de la habitabilidad de los centros penitenciarios y se han abierto 4 nuevos centros, 24 Centros de Inserción, 2 Unidades de Madres y se está trabajando en la construcción de otros 8 centros, 3 CIS y 3 Unidades de Madres, incrementándose así el número de plazas del sistema.
Gracias a todas las mejoras en seguridad, a la implantación de programas de tratamiento, módulos de respeto y otras actividades laborales, formativas y tratamentales, los incidentes no han aumentado en estos años. Así, las agresiones muy graves a funcionarios han sido 4 de 2004 a 2010, muy por debajo de las producidas en los 6 años anteriores. Por su parte, las agresiones graves se han reducido un 50% en los últimos 4 años.
En la actual situación económica, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias confía en el sentido de la responsabilidad de los empleados públicos penitenciarios.
Asimismo, reitera el reconocimiento a los profesionales de la Institución que desarrollan su trabajo en un medio tan complejo y tan importante para la seguridad ciudadana.
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