miércoles, 18 de abril de 2012

Desarticulan al clan más importante de venta de droga en la Cañada Real


Un patriarca gitano y su mujer, septuagenarios, lideraban el grupo. La Policía derribó un muro y una puerta bunkerizada
El conocido clan de los «Fernández-Fernández, el que en la actualidad manejaba el negocio del tráfico de droga en el sector VI de la Cañada Real Galiana ha sido desmantelado por la Policía Nacional. De los 19 detenciones en total, nueve de ellos han ingresado en prisión por un delito contra la salud pública, mientras que el resto, que quedó en libertad, están imputados.
Entre ellos, los patriarcas, un matrimonio de 73 y de 71 años, de etnia gitana, que lideraban el negocio desde una parcela situada frente, en donde se producía la venta.
Ambos recintos estaban totalmente blindados para dificultar el acceso; por ello, los agentes del Grupo Operativo de Operaciones Técnicas, el de la Policía Judicial de Comisaría de Villa de Vallecas y la UIP tuvieron que derribar un muro y una puerta de la edificación en donde se distribuía el estupefaciente por la fuerza, haciendo uso de arietes, debido a la negativa de sus ocupantes a fraquearles la entrada.
La operación se realizó el jueves pasado, según han explicado esta mañana el rueda de prensa la Delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, el Jefe Superior de Policía, Alfonso José Fernández Díez, y el comisario del distrito Porfirio Jiménez.

60.000 euros en efectivo

En total, fueron intervenidos 60.000 euros en efectivo, cinco vehículos de alta gama, nueve armas de fuego, entre ellas una pistola-ametralladora, medio kilo de cocaína, joyas, monedad de oro y diversos útiles para manipular la sustancia, parte de la cual, la tiraron por el inodoro, como suele ser habitual, precisó Fernández Díez. No obstante, la Policía realiza en estos casos el narco-test.
«El negocio les iba tan bien y tenían tanta clientela que iban a adquirir más casa deshabitados para ampliarlo. El organigrama de la red era muy simple: además del control que realizaban los patriarcas desde el edificio de enfrente, unos se dedicaban al abastecimiento y compra -los miembros del grupo familiar-; otros a hacer las tareas de seguridad y vigilancia -en este caso, los toxicómanos o "machacas", a cambio de una micra cada cuatro horas-, y, por último, estaban los vendedores, siempre mujeres», precisó Jiménez.
Por su parte, Cifuentes subrayó que el sector VI está en su punto de mira y que desde 2011 se han desarrollado 25 operaciones, con un resultado de 129 personas detenidas, la intervención de 33 vehículos de alta gama y la incautación de 16 armas de fuego.
 
ABC

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