La Udyco vincula a Iván Chaves con un relevante contratista de la Junta andaluza
Los
investigadores del grupo de Blanqueo de la Unidad contra la Droga y el
Crimen Organizado (Udyco) de Sevilla vinculan a Iván Chaves Iborra, hijo
del ex vicepresidente del Gobierno y ex presidente andaluz Manuel
Chaves, con los responsables de una agencia de publicidad que logró 5,9
millones de euros en adjudicaciones de la Junta de Andalucía.
Los agentes fueron más allá del supuesto robo de documentos denunciado en marzo pasado por el hijo de Manuel Chaves y llevaron sus pesquisas hasta la supuesta trama empresarial de la que se valía para conseguir contratos con la Junta de Andalucía a cambio de comisiones. En ese entramado figura la empresa Mediasur Agencia de Medios SA, cuyo director general, Rafael Sánchez-Zaragoza, fundó la empresa Exiden Participaciones Industriales SL junto a Iván Chaves Iborra.
La Udyco confirma así las informaciones publicadas por EL MUNDO en abril del año pasado, en las que ya se señalaba que la Junta de Andalucía había adjudicado contratos por valor de 5,9 millones de euros a socios del hijo del entonces vicepresidente del Gobierno.
La Junta contrató con Mediasur al menos 19 campañas de publicidad de 2004 a 2010. Entre ambas fechas, el 5 de octubre de 2006, el director general de la agencia de publicidad fundó Exiden Participaciones Industriales junto a Iván Chaves.
Según ha podido saber EL MUNDO, los especialistas en blanqueo de capitales de la Policía Nacional siguieron el rastro de las incontables sociedades que aparecían en los contratos cuyo robo denunció Iván Chaves y llegaron a la conclusión de que, como mínimo, el hijo del presidente del PSOE está o ha estado vinculado al menos a seis empresas, algunas de las cuales recibieron adjudicaciones de la Junta.
Los agentes fueron más allá del supuesto robo de documentos denunciado en marzo pasado por el hijo de Manuel Chaves y llevaron sus pesquisas hasta la supuesta trama empresarial de la que se valía para conseguir contratos con la Junta de Andalucía a cambio de comisiones. En ese entramado figura la empresa Mediasur Agencia de Medios SA, cuyo director general, Rafael Sánchez-Zaragoza, fundó la empresa Exiden Participaciones Industriales SL junto a Iván Chaves Iborra.
La Udyco confirma así las informaciones publicadas por EL MUNDO en abril del año pasado, en las que ya se señalaba que la Junta de Andalucía había adjudicado contratos por valor de 5,9 millones de euros a socios del hijo del entonces vicepresidente del Gobierno.
La Junta contrató con Mediasur al menos 19 campañas de publicidad de 2004 a 2010. Entre ambas fechas, el 5 de octubre de 2006, el director general de la agencia de publicidad fundó Exiden Participaciones Industriales junto a Iván Chaves.
Según ha podido saber EL MUNDO, los especialistas en blanqueo de capitales de la Policía Nacional siguieron el rastro de las incontables sociedades que aparecían en los contratos cuyo robo denunció Iván Chaves y llegaron a la conclusión de que, como mínimo, el hijo del presidente del PSOE está o ha estado vinculado al menos a seis empresas, algunas de las cuales recibieron adjudicaciones de la Junta.
Los
responsables de la investigación ven distintos grados en la relación de
Chaves Iborra con estas sociedades, en función de si figura
explícitamente en el accionariado o, como sucede en muchos casos, se
vale de supuestos testaferros.
De acuerdo con este criterio, el Grupo de Blanqueo de Capitales sitúa en un primer nivel a las tres empresas en las que figura nominalmente Iván Chaves. Se trata de Cexmark Soluciones SL, creada en diciembre de 2006, de la que es único propietario y que se encarga de comercializar el alquiler de los locales de Metropol Parasol, un millonario proyecto urbanístico del Ayuntamiento de Sevilla adjudicado a Sacyr; Núcleo de Inversiones y Negocios SL, junto con Cexmark la única empresa en la que figura actualmente el hijo de Manuel Chaves, fundada en julio de 2008 junto a su amigo y socio Javier Olaegui de la Infiesta; y Exiden Participaciones S.L., fundada en octubre de 2006 entre Iván Chaves Iborra, Javier Olaegui y Rafael Sánchez-Zaragoza, el director general de Mediasur.
Cexmark era la destinataria última de comisiones que se canalizaban a través de varias empresas y que procedían de contratos adjudicados por consejerías y organismos de la Junta. Esa misma función, la de canalizar comisiones, tendría Núcleo de Inversiones y Negocios.
Iván Chaves y Javier Olaegui tenían acordado repartirse al 50% las comisiones que obtuvieran en cualquier negocio y éste, a su vez, firmó un contrato con el director general de Mediasur por el que se garantizaba comisiones de hasta el 45% del «beneficio bruto» de adjudicaciones de la Junta de Andalucía a la agencia de publicidad.
En un segundo escalón colocan los investigadores a otras tres sociedades: Inverolaegui SL, creada por Javier Olaegui; Exit Desarrollo Internacional SL, fundada por Julio Javier Moreno Valseca, hijo de un alto cargo de la Junta y que realizó informes para el Gobierno autonómico, y Guzzar Easymedia, propiedad de Antonio Sánchez y Rafael Sánchez-Zaragoza. En total, los agentes de la Policía han investigado 31 empresas del entorno de Iván Chaves.
Entre los investigados está también Asensio Vicente Molina Ortiz, vinculado a Mediasur y a Zosma Media, que aparece nombrada en la contabilidad de la empresa de Iván Chaves con la previsión de pago de un fijo mensual de 4.640 euros.
De acuerdo con este criterio, el Grupo de Blanqueo de Capitales sitúa en un primer nivel a las tres empresas en las que figura nominalmente Iván Chaves. Se trata de Cexmark Soluciones SL, creada en diciembre de 2006, de la que es único propietario y que se encarga de comercializar el alquiler de los locales de Metropol Parasol, un millonario proyecto urbanístico del Ayuntamiento de Sevilla adjudicado a Sacyr; Núcleo de Inversiones y Negocios SL, junto con Cexmark la única empresa en la que figura actualmente el hijo de Manuel Chaves, fundada en julio de 2008 junto a su amigo y socio Javier Olaegui de la Infiesta; y Exiden Participaciones S.L., fundada en octubre de 2006 entre Iván Chaves Iborra, Javier Olaegui y Rafael Sánchez-Zaragoza, el director general de Mediasur.
Cexmark era la destinataria última de comisiones que se canalizaban a través de varias empresas y que procedían de contratos adjudicados por consejerías y organismos de la Junta. Esa misma función, la de canalizar comisiones, tendría Núcleo de Inversiones y Negocios.
Iván Chaves y Javier Olaegui tenían acordado repartirse al 50% las comisiones que obtuvieran en cualquier negocio y éste, a su vez, firmó un contrato con el director general de Mediasur por el que se garantizaba comisiones de hasta el 45% del «beneficio bruto» de adjudicaciones de la Junta de Andalucía a la agencia de publicidad.
En un segundo escalón colocan los investigadores a otras tres sociedades: Inverolaegui SL, creada por Javier Olaegui; Exit Desarrollo Internacional SL, fundada por Julio Javier Moreno Valseca, hijo de un alto cargo de la Junta y que realizó informes para el Gobierno autonómico, y Guzzar Easymedia, propiedad de Antonio Sánchez y Rafael Sánchez-Zaragoza. En total, los agentes de la Policía han investigado 31 empresas del entorno de Iván Chaves.
Entre los investigados está también Asensio Vicente Molina Ortiz, vinculado a Mediasur y a Zosma Media, que aparece nombrada en la contabilidad de la empresa de Iván Chaves con la previsión de pago de un fijo mensual de 4.640 euros.
Elena Valenciano, igual que un disco rayado
LA
DIRIGENTE socialista Elena Valenciano declaró ayer que las
informaciones de este periódico sobre el hijo de Chaves son «otra
campaña» contra el ex presidente andaluz. Valenciano afirmó que éste
nunca ha sido procesado y que lo revelado por nuestro diario «no es
cierto». ¿Qué no es cierto? Porque lo que EL MUNDO publicaba era un
informe del Grupo de Blanqueo de Capitales de la Policía que sitúa a
Iván Chaves como eje de una red delictiva. Fue también Elena Valenciano
la que declaró en vísperas de las elecciones generales que las
informaciones de este periódico sobre José Blanco formaban parte de «una
campaña» y que la Justicia archivaría el caso. Se equivocó. Por lo
visto, la fiel mano derecha de Rubalcaba repite siempre la misma
cantinela sin tomarse la molestia de verificar aquello sobre lo que se
pronuncia
epsimo y EL MUNDO
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