Porque nos tememos que hasta el 18 de noviembre vamos a adentrarnos en una tremenda paradoja: cuando los españoles necesitan más certezas para hacer frente a una crisis ya demasiado profunda y duradera, un socialismo a la defensiva y sin argumentos va a proponerles más nebulosas y, lo que es peor, promesas más inalcanzables que nunca.
Hoy tenemos el primer ejemplo. El vicepresidente del Gobierno que ha realizado el mayor recorte del Estado del Bienestar de la historia reciente y que ha provocado el colapso de las cuentas públicas ha organizado su particular jornada de lucha en las once comunidades autónomas en las que gobierna el PP para protestar contra los recortes que está aplicando para sanear las cuentas. Es una iniciativa absolutamente demagógica que hay que censurar sin paliativos. En primer lugar, porque las medidas de ajuste son necesarias y hay que adoptarlas debido a que la política de despilfarro aplicada por el Gobierno socialista hasta mayo de 2010 llevó al país al borde del abismo. Rubalcaba no debería protestar contra el PP sino contra sí mismo como protagonista y causante del descontrol del déficit y de la deuda que nos han colocado en el punto de mira de todos los organismos internacionales.
En segundo lugar, el palpable electoralismo de la protesta se manifiesta en que Rubalcaba sabe que si hipotéticamente ganara las elecciones, no podría realizar una política de ajustes distinta de que la que están proponiendo el PP o CiU..., o la que, por ejemplo, tenía previsto aplicar el socialista José María Barreda en Castilla-La Mancha para cumplir con las exigencias del Ministerio de Economía, como desveló EL MUNDO.
En la misma línea de falta de respeto a los ciudadanos, Rubalcaba afirmó ayer que si forma Gobierno tras el 20-N subirá las pensiones y el sueldo de los funcionarios. Pero él era ministro en el Ejecutivo que aprobó en mayo de 2010 la congelación de las pensiones y la reducción del salario de los empleados públicos para hacer frente a una situación económica insostenible; y en 2012 estaremos peor porque ya es vox populi que este año no reduciremos el déficit público al 6% como está previsto y harán falta ajustes adicionales. Si la política socialdemócrata de Zapatero y Rubalcaba nos ha metido de lleno en la crisis es utópico pensar que la misma solución socialdemócrata liderada ahora en solitario por Rubalcaba nos vaya a sacar del pozo. Lo grave es que lo sabe y no lo está diciendo así a los ciudadanos
RUBALCABA SE CENTRA EN SU ESPECIALIDAD: El golpe de Estado. Convoca "jonardas de lucha" contra los ajustes obligados por la quiebra y déficit.
El PSOE ha decidido convertir en el eje de su campaña electoral el discurso político más tradicional de la socialdemocracia: la defensa de los pilares del Estado del Bienestar frente al riesgo de que el PP prepare «su desguace», como dijo ayer el candidato del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba.Para ello, hoy emprenderá una auténtica jornada de lucha para denunciar los recortes aprobados en las distintas comunidades autónomas gobernadas por los populares. Según los socialistas, estas medidas adoptadas en las últimas semanas son la antesala de la política que desarrollará Mariano Rajoy si gana las elecciones el próximo 20-N.
La jornada consiste en la convocatoria de 11 conferencias de prensa en las 11 comunidades gobernadas por el Partido Popular -todas excepto Andalucía, País Vasco, Cataluña, Asturias, Navarra y Canarias- que serán protagonizadas por los principales dirigentes territoriales del PSOE.
En cada comunidad, los barones del PSOE darán datos detallados de los recortes emprendidos por el PP en los poco más de 100 días que llevan al frente de estas autonomías, tras las elecciones del 22 de mayo, y también en Galicia, donde gobierna desde 2009.
Así, según la documentación a la que ha tenido acceso EL MUNDO, se denunciará la eliminación de la ayuda extra de 400 euros a 32.000 viudas en Castilla-La Mancha; la supresión de 2.500 camas hospitalarias en la Comunidad Valenciana; la reducción de un 10% del profesorado en Madrid; el recorte de 500 millones de euros en Sanidad y Educación en Galicia; la reducción de un 30% de las becas para comedores escolares en Murcia, etcétera.
Cada dirigente socialista ampliará y analizará hoy estos datos en su propia comunidad autónoma, una tarea de recopilación a la que llevan dedicando varias semanas, para preparar esta ofensiva política.
Las ruedas de prensa se realizarán entre las 10.30 de la mañana y las 13.00 horas, y la campaña irá respaldada por un vídeo elaborado por el partido, en el que se utilizan imágenes de manifestaciones sindicales y de los llamados indignados, junto con datos concretos de los recortes en cada comunidad autónoma y algunas manifestaciones textuales de líderes del PP.
En este aspecto, el PSOE quiere seguir con su estrategia electoral de sostener su campaña en dar publicidad a las declaraciones públicas de los dirigentes del PP y, sobre todo, de su líder, Mariano Rajoy, que también aparece en el vídeo.
El broche final de la jornada lo pondrá en una conferencia de prensa el propio candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, en la sede madrileña de Ferraz.
Rubalcaba, previsiblemente, dará perspectiva nacional a esta ofensiva electoral contra los recortes del PP, aportando datos más globales y fijando la posición de los socialistas de cara a la campaña electoral y el futuro programa político que se ultimará este fin de semana en la Conferencia del PSOE.
De hecho, el candidato del Partido Socialista ya despejó ayer su posición tras la visita a la empresa Flisa y una reunión con la patronal Cepes, que agrupa al sector de la denominada economía social.
Tras este encuentro, Rubalcaba aseguró que si gana las elecciones no congelará en 2012 las pensiones ni el salario de los funcionarios, y señaló que cuando el líder del PP, Mariano Rajoy, dice que «depende», en realidad quiere decir que sí lo hará.
El candidato socialista reconoció que a los funcionarios no les puede «prometer» grandes subidas salariales, «pero entre la congelación y una subida salarial grande hay mucho camino intermedio». Y añadió: «Pero yo ni congelaré pensiones ni congelaré retribuciones de funcionarios».
El candidato socialista cree que ha llegado el momento de dejar de ser «prudente» a la hora de comentar las propuestas de Rajoy porque, en su opinión, sus palabras están en sintonía con lo que están haciendo sus gobiernos autonómicos.
En este sentido, recordó los recortes que están aplicando los gobiernos del PP en Madrid en materia de Educación; Castilla-La Mancha, en Sanidad; en Galicia, eliminando la gratuidad de los libros, o los que hoy se anunciarán en Baleares.
Para Rubalcaba, todo ello demuestra el «descaro de la derecha» con el Estado de Bienestar. «Y uno tiene la obligación de decirle al señor Rajoy que aclare sus planes, que es muy importante, porque da la impresión de que están preparando un desguace del Estado de Bienestar. Y conviene que se sepa», recalcó el candidato del PSOE.
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