CSIF y otros:
Nuestra dignidad y nuestra profesionalidad, por tanto, no deben cuestionarse alegremente en el zoco mediático ni recibir un tratamiento informativo que alimente el lugar común, el tópico, la metáfora fácil y la descalificación sistemática, ingredientes alejados de lo que debe ser un trabajo periodístico contrastado y riguroso y que puede socavar el respeto que este colectivo merece.
Colectivo y trabajadores que desde las áreas de seguridad, tratamental, asistencial y de mantenimiento prestamos nuestro servicio y volcamos nuestra labor diaria en la consecución del prioritario objetivo a que nos obliga nuestra constitución en su art.25.2, y que no es otro que la reeducación y reinserción de todo interno a nuestro cargo.
Todo ello, además, en unos centros cada vez más hacinados y masificados, con unas condiciones laborales que empeoran a diario y que se manifiestan en una constante pérdida de derechos y padeciendo una penosa precariedad en medios materiales y escasez de medios humanos.No obstante, el colectivo que trabaja en este centro penitenciario cordobés se siente orgulloso de trabajar donde lo hace, y como fruto a nuestro compromiso se nos reconoce y valora públicamente en bastantes ocasiones que no encuentran ni los ecos ni las portadas merecidas, ya que es muy fácil dejarse llevar sólo por la inercia y el cliché y no por la actualidad.
Exigimos, para finalizar, que no se nos vuelva a situar más en el ojo ni en el centro de ninguna diana, que no se juegue más con el valor de nuestra imagen, porque gracias a la confianza que nuestros compañeros han depositado en nosotros, estaremos dispuestos a defenderla y a defenderlos en las instancias que creamos oportunas.
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