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En enero de 2011, cuando lo peor de la crisis estaba por llegar, FAES
alertó del «descontrolado» proceso de descentralización. José María
Aznar presentó el estudio 'Por un Estado autonómico racional y viable' y
proclamó que «España no puede competir con 17 comunidades autónomas que
quieren ser miniestados». El diputado Gabriel Elorriaga realizó las
'Propuestas para el futuro' del estudio y apuntó a una necesaria
homogeneización autonómica, fiscal y financiera y a una mejor
delimitación de las competencias. El hoy presidente de la Comisión de
Hacienda y Administraciones Públicas del Congreso ya apuntaba hace año y
medio que «no existen ya márgenes para la cesión» de más autogobierno.
El modelo entonces -tras el Estatuto de Cataluña- daba «claros síntomas
de agotamiento» y había producido «conflictividad política». Elorriaga
apuntó que es «imprescindible» «redefinir el modelo para garantizar su
viabilidad». Y apuntó propuestas descartadas por el Gobierno como la
fusión de municipios o incluso la agrupación de comunidades, así como
«evitar duplicidades» y caminar hacia «un sistema tributario único». Hoy
no sólo no se ha avanzado hacia esa posibilidad, sino que el Gobierno
de Cataluña reclama un sistema fiscal propio. Además, Elorriaga apuntó
que era «imprescindible y urgente» mejorar la estabilidad financiera y
establecer límites al endeudamiento
epsimo y EL MUNDO
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