Interior ultima el plan que afectará a más de mil agentes, repartidos por toda España
La
custodia de las prisiones es una de las tareas que la Guardia Civil ha
tenido encomendada tradicionalmente de forma mayoritaria, pero esta
norma cambiará en breve. El Ministerio del Interior ultima un plan para
privatizar en parte este servicio del que en la actualidad se ocupan
unos 1.600 agentes en toda España, según datos oficiales. Los escoltas
privados del País Vasco y Navarra serán los nuevos vigilantes de las
prisiones, tal y como ha confirmado la Dirección General de la Guardia
Civil. El mando del servicio continuará, no obstante, a cargo de uno o
varios agentes en un modelo que seguirá el camino del que funciona en
los aeropuertos.
«Optimizar
recursos» y dar una salida laboral a los escoltas del País Vasco y
Navarra, pagados por el Ministerio del Interior, que se quedarán sin
trabajo tras la reducción aprobada de casi la mitad del personal privado
que presta servicios de protección. Esos son los objetivos que se
persiguen con el plan del Ministerio y que ha encomendado a la Dirección
General, según fuentes del Departamento.
La
primera confirmación se produjo el pasado martes en el Pleno del
Consejo de la Guardia Civil, el primero que presidió el ministro Jorge
Fernández Díaz. A preguntas de un vocal de la Asociación Unificada de la
Guardia Civil (AUGC) sobre una eventual privatización en determinadas
unidades de vigilancia, el «número 2» del Cuerpo explicó que existía un
proyecto en este sentido y que pasaba por emplear seguridad privada
procedente de la reducción sustancial del número de escoltas.
Más jubilados que nuevos
Un par de días
después, en la misma AUGC se recibió una llamada telefónica más precisa,
tras una reunión celebrada en la Secretaría de Estado de Seguridad. En
dicho encuentro se confirmó a la Guardia Civil la «inminente» puesta en
marcha del plan de privatización parcial de esos servicios, aunque sin
plazos concretos, así como que se había acordado con los escoltas.
Las
premisas iniciales distinguen entre los agentes asignados a las
unidades de seguridad penitenciaria, que en principio reforzarán las
conducciones de presos y el resto, que quedarán a la espera de nuevos
cometidos. Los representantes de los guardias civiles han advertido que
estarán vigilantes para que no se perjudiquen los intereses de los
afectados «por una decisión gubernamental».
La
razón de este plan, según fuentes del Cuerpo, es cubrir el problema de
falta de personal que ya empieza a ser importante en algunos servicios.
Solo el año pasado se jubilaron más agentes por enfermedad (sin contar a
los que les correspondía por edad) de los que ingresaron, y esa
carencia tiene visos de agudizarse con la crisis.
Aunque
es la Guardia Civil la que se encarga de la mayoría de las prisiones,
la seguridad de algunos centros penitenciarios está encomendada al
Cuerpo Nacional de Policía. Curiosamente, sus representantes sindicales
no han recibido ninguna noticia sobre un eventual cambio en el destino
de los agentes.
ABC
Yo pienso que una redacción más real de la noticia podría ser:
ResponderEliminar"El gobierno expulsa a la guardia civil de las cárceles para mantener a flote las empresas de seguridad vinculadas a Mayor Oreja y su familia en una de las mayores operaciones encubiertas de la contratación pública de la historia de España.
Varios miles de agentes podrían quedar disponibles al perder el destino en el que algunos llevan décadas prestando servicio, quedando en situación precaria no sólo ya por la inestabilidad social que ello conlleva, sino por la importante merma que este tipo de reestructuración pueden acarrear para unos agentes de policía que se encuentran entre los peores retribuidos de Europa y que permanecen bajo el control de poder militar.
La situación a la que quedan expuestos estos funcionarios militares y sus familias, recuerda al repliegue de la guardia civil en Cataluña, cuando el entonces director de la guardia civil Santiago Valdivieso afirmaba cuando se le preguntaba que se estudiaría caso por caso para que no afectara a la normalidad de la vida de los guardias civiles destinados en esa comunidad autónoma y de sus familias. Meses después, los mismos guardias que oyeron ese discurso, recibían con asombro el cierre de sus cuarteles vía fax y con carácter inmediato, de un día para otro, algunos llevaban en Cataluña más de 20 años y sus hijos eran catalanes de nacimiento."
Ahora empezamos a comprender por qué Mariano Rajoy decía con la boca abierta que él quería una guardia civil militar.
El mantenimiento de un cuerpo con funciones únicamente policiales bajo la jurisdicción militar no tiene ningún sentido que no sea el de menoscabar los derechos de los agentes. La Guardia Civil es una anacronía en la sociedad actual encubierta por todos los gobiernos de turno. Funcionarios preparados para ser policías bajo el bastón de mando de militares, una parcela del ministerio de defensa arrendada al ministerio del interior. El mayor engaño público en este asunto fue el llevado a cabo por el PSOE cuando dijo que había unido la dirección de ambos cuerpos en una única dirección, y se limitó poco menos que a cambiar el membrete de los folios.
Los gobiernos de turno llevan años engañando y disfrazando la realidad de la guardia civil con marketing social, alardeando que son un cuerpo modélico, que si la guardia civil del mar, que la policía ecológica (seprona) , que la policía científica, y bla, bla, bla. En resumen, el cuerpo con menos derechos y peor retribuido de Europa, esa es la única realidad, a años luz del cuerpo nacional de policía (más horas, menos medios y menos sueldo). Por cierto, a ver que ocurre en las prisiones que están bajo el control del CNP.
¿Por qué no dicen la verdad de una vez? ¿Por qué no reconocen de una puñetera vez que quieren mantener al EJÉRCITO en las calles cumpliendo misiones de seguridad ciudadana y orden público?
Claro, eso no queda bien en la Europa del siglo XXI, mejor seguir engañando al mundo si es necesario con tal de poder contar con una policía más barata de Europa y que sigue funcionando a golpe de corneta.
Después de leer esta noticia, la entrada inminente de la ley de transparencia en el congreso parece ya el último chiste de esta negra historia a juzgar por el trasfondo de la noticia.
esto es única y exclusivamente para beneficiar a las empresas de seguridad.
ResponderEliminarLos redución de escoltas en el pais vasco viene ocurriendo desde hace dos años, esos escoltas que quedaron en el paro ya estan trabajando en otra cosa o algunos seguiran en el paro, pero para las prisiones no los van a contratar a ellos, van a contratar a gente nueva como vigilantes. Ademas una categoria profesional es ser escolta y otra vigilante de seguridad.
Lo tratan de enmascarar así, como que es para beneficiar a los vigilantes pero es una gran mentira, es solo para beneficiar a las empresas de seguridad.
Y ademas les va a salir mucho más caro.
Nunca en la vida pense que un guardia civil pudiera perder su trabajo por que es muy caro. Increible